En un proceso de aprendizaje con Educación Relacional, el rol del educador se caracteriza por orientar acciones que faciliten en el estudiante la identificación de su avance y resultados, a medida que supera las etapas de desarrollo de las habilidades y que además, permitan la mejora permanente del desempeño. Con respecto a tu rol como docente, proponemos las siguientes estrategias para apoyar a tus estudiantes:
1. Genera confianza. Ejemplo: acompaña la construcción de la meta personal para tu área, de manera que se refleje el propósito de las tareas al completar cada etapa de aprendizaje.
2. Despierta el interés e impulsa la motivación. Ejemplo: muestra diferentes objetivos que se podrían alcanzar con las tareas y facilita la elección del que más interese a tus estudiantes.
3. Brinda herramientas que apoyen la gestión académica. Ejemplo: orienta el uso de rutinas y herramientas de pensamiento para que los estudiantes gestionen los recursos de investigación y consulta. Esto permite que la información se procese de forma que facilite la comprensión, síntesis, análisis y representación.
4. Facilita la construcción de un proceso de evaluación propio del estudiante. Ejemplo: utiliza la técnica “Think aloud” o pensar en voz alta, con la que se busca describir cada cosa que se piensa mientras se desarrolla. Al realizar este ejercicio como ejemplo, el estudiante aprenderá a modelarlo para su propio uso y beneficio.
Te invitamos a seguir estas acciones que garantizan el desarrollo de las habilidades.
Autor: Yeffer Alejandro Peña Leguizamón