Momentos del día

Las metas en Educación Relacional son el camino para alcanzar grandes logros.

Al hablar de metas, generalmente visualizamos el resultado y sus beneficios, sin embargo, es importante detenerse a pensar en el camino que hay detrás de ellas. Lograr tener claridad en el camino y llegar a puntos en los cuales podemos hacer cambios necesarios para alcanzar dichas metas también dependerá de disponer nuestro espacio tanto física pero mayor aún, mentalmente. Para ello, Educación Relacional ha implementado la estrategia de Momentos del día.

¿Qué nos hacen pensar las palabras momentos del día?  Nos hace pensar en primera instancia, en que vamos a tener una organización por tiempos por cada día. Y en segunda instancia, que debemos tener una planeación en cuanto a esos momentos, que permitan responder con acciones puntuales para el alcance de nuestras metas.

¿Para qué desarrollamos los Momentos del día? Para Educación Relacional se hace evidente que es necesario estructurar y organizar nuestro día a día, ya que, con los pequeños pasos, vamos aportando a la construcción y al desarrollo de nuestras metas, no solo en el estudio sino en la vida cotidiana. Es en este punto, en el cual, los Momentos del día y el trabajo desde casa con las familias se articula.

Es importante identificar que, como docentes o padres, necesitamos:

• Ejercer unos parámetros y, estructurar las rutinas y los hábitos de los niños, con la finalidad de poderles brindar un camino que les muestre cómo planear para la vida.
• Ayudar a distribuir sus tiempos en diferentes actividades (momentos), ya sean de gusto o deber.
• Expresar acciones sencillas como saludar y despedirse, pedir el favor, realizar las tareas, llevar los implementos de la actividad, arreglar su cuarto, entre otros.

Es por ello, que desde Educación Relacional se proponen tres momentos en el día a día: apertura, desarrollo y cierre. Cada uno de ellos tiene un objetivo y permite tener una rutina con nuestros hijos. En la apertura, podemos motivar el trabajo del niño incentivando su proceso de aprendizaje, apoyándonos en actividades con algún juego lúdico o un programa educativo y podemos planear el trabajo del día con preguntas orientadoras y sugerencias: ¿Qué vas a trabajar/qué deseas trabajar hoy?; ya hemos trabajado bastante este tema, hoy podemos trabajar este otro.

El desarrollo de las actividades es dónde se logra identificar la disposición del niño a partir del estado de ánimo que demuestre ante las propuestas de trabajo, sin olvidar que hay actividades que se deben cumplir independientemente de la elección que ellos hagan. Puede pasar que los estudiantes demuestren constantemente disposición a hacer las actividades de ciertas áreas, pero dejar rezagadas otras. Además, es importante ser flexible con los niños, ya que algunos días pueden estar muy enfocados como hay días en los que pueden estar más dispersos, para esto último las metas propuestas serán más cortas.

El cierre, espacio en el cual evaluamos con los niños, si se alcanzaron las metas propuestas. Revisamos si las estrategias funcionaron y les decimos en que pueden mejorar.

Para garantizar los momentos del día, debemos seguir los siguientes pasos como padres:

1. Tener varias estrategias de empleo de los Momentos del día.

• Apertura, desarrollo y cierre (días donde los niños estén más enfocados).
• Apertura, desarrollo con actividades lúdicas al finalizar cada actividad y cierre (días en los cuales los niños estén más dispersos).

2. Conocer que áreas o actividades han desarrollado los niños los días anteriores para estructurar mejor el trabajo del día y hacerlo variado.

3. Es importante diferenciar los tres momentos, por ejemplo, con frases como “ya iniciamos el día con un juego es hora de hacer otras actividades”. Lo que permite al estudiante reconozca y mejore su habilidad en el manejo del tiempo.

4. Los Momentos del día se complementan con la planeación (mensual, quincenal o semanal) que hacen los niños.

Esta estrategia de Momentos del día en casa, nos permite ver el ritmo con el que trabajan los niños, ver en qué partes necesita más ayuda y determinar en qué puntos puede trabajar solos, además de lo mencionado anteriormente. Asimismo, nos permite conocer a los estudiantes y llegar a tener acuerdos que reforzarán su sentido de la responsabilidad.