Cómo apoyar a nuestros estudiantes deportistas

Cuando un estudiante tiene como proyecto de vida ser deportista, en ocasiones ve afectados sus objetivos académicos. Entre otras situaciones, las familias e instituciones educativas condicionan la práctica deportiva al rendimiento académico, suspendiendo horas de acondicionamiento esenciales para lograr mejores desempeños. Esto genera estrés, tensión y ansiedad que afectan la vida del estudiante.

Educación Relacional propone acciones efectivas para que familia, academia deportiva e instituciones educativas apoyen integralmente a quienes deciden el deporte y la competencia como proyecto de vida:   

1. Promover en el estudiante el planteamiento de un cronograma de actividades académico-deportivas, donde se evidencien los horarios de entrenamiento, competencia y compromisos académicos. Estos permitirán tomar decisiones fundamentales en torno a las adaptaciones o estrategias.

2. Definir cuáles son las habilidades y estrategias fundamentales que se desarrollarán tanto en lo deportivo como en lo académico y que se relacionen con el logro de mayores desempeños en los dos ámbitos. Por ejemplo: si el estudiante es tenista y suele iniciar muy bien sus partidos pero le cuesta cerrar con éxito una competencia, pueden fortalecerse habilidades para el monitoreo y evaluación, las cuales se practican comúnmente en las tareas académicas, logrando así integrar lo cognitivo con lo lúdico. En este caso, entrenador, docente y familia pueden comunicarse para concertar estrategias efectivas que le permitan al estudiante superar dificultades en momentos de bajo rendimiento.

3. Identificar las temporadas del año en las que el estudiante puede encontrarse abrumado y definir estrategias para apoyarlo junto con su familia. Ejemplo: finales de un torneo, cierre de un periodo académico etc. Lo anterior es porque los momentos importantes de los dos calendarios en ocasiones coinciden generando mayores tensiones que en ocasiones llevan a la deserción.

4. Es necesario que los deportistas cuenten con un plan de estudios personalizado que reconozca sus tiempos, gustos, necesidades, entre otros aspectos para que exista una equidad y sobre todo no se genere sobrecarga cuando el estudiante debe ausentarse de su institución para cumplir con compromisos deportivos.